Hoy he leido esta noticia en Meristation y no he podido evitar soltar una carcajada. Alguna vez he dejado la consola encendida una noche, pero no veinte años. ¿Estamus locus u qué?
Hoy dia las partidas se guardan solas, se suben a la Nube o se copian en USB. Pero hace veinte años eran muy pocos los cartuchos que venían con SRAM, una memoria RAM estática con baterias de litio ubicada dentro del cartucho que permitía almacenar las partidas. Y allí se quedaban mientras conectásemos la consola y la batería se recargase.
Umihara Kawase, el primero de una serie de éxito en Japón con muchos fans- era un juego de la Super Famicom -la Super Nes japonesa- que usaba esto y venía con SRAM para almacenar la partida, motivo que ha llevado a un usuario a no desconectar su consola en todo este tiempo para no perder la partida guardada. O sea, a no apagar su Super Famicom en 20 años.
Conectada sin apagarse más que una sola vez por motivos de mudanza, el cartucho del juego de este fan hardcore de la saga, «que ha estado puesto en la SNES durante 20 años, lleva en ejecución alrededor de 180.000 horas. Si apago el sistema, perderé toda mi partida guardada. Seguramente».
Y es por ello que esa consola ha estado encendida durante tanto tiempo, otra muestra también de lo resistentes que hacían los sistemas de hace varias generaciónes. ¿Os imagináis que a este hombre se le va la luz un día en casa?
Este es el juego en cuestión: