Si eres coleccionista de consolas portátiles y tienes 249$ para invertir, puedes hacerlo en alguna de estas Game Boy Advance basadas en la Super Famicom y en la SNES. Las fabrica la empresa Rose Colored Gaming y como todas las que hace esta empresa, estás también son retroiluminadas. Además, llevan el logo de Super Famicom o Super nintendo impreso en el cristal de la pantalla, los botones con los colores del mando de cada una de las versiones de sobremesa y van empaquetadas en una caja acorde a cada sistema. Son muy bonitas, pero me parecen bastante caras.